nido y destello


Tus palabras me mecen

entre gotas oceánicas
y pulsos de estrellas.
Mi savia se alborota
y planeo levísima
sobre el cosmos de tu alma,
donde estoy desde el origen,
preñada en luna y fuego,
a punto de parirnos,
hombre y mujer:
nido y destello.

©Germana Martin

Gestado a partir del poema Balbuceo una plegaria, de Martín Alvarenga.
La imagen es la obra "Amantes-mariposa" de Javier Rubinstein.

semilla


Dulce semilla.
Me dejo beber
por los pájaros de tu boca,
para renacer en versos
prohibida y delicia,
ya madura.

©Germana Martin

La bella imagen es la obra "Mujer Vaina 2" de Gloria Lizano López,
y acompaña la historia "La Mujer Semilla"
http://glorializanolopez.blogspot.com
¡Muchas gracias!

oceánica


Ella se sumerge en profundidades imposibles, conoce seres impensables.
Algunas veces encuentra rostros conocidos y olvidados.
Se hunde, se ahoga, se desprende, se pierde...

Es por eso que Él, cada mañana,
la rescata y la despierta con el desayuno en la cama.

©Germana Martin

La bella imagen es la obra "Yemenya" de la artista chilena Yvonne ¡Muchas gracias!
http://ivonnencolores.blogspot.com/

uvalunas



enhebro con cuidado
lunas violetas
brillantes y redondas
como uvas,

para tus dulces sueños.

© Germana Martin


La imagen es de Elena Villarreal    
http://tierrafebril.blogspot.com

lluvia


no llovió afuera
como lo esperábamos

la tormenta fue dentro
se volaron los geranios del jardín
junto con los retratos de papá y mamá
un tornado arrancó el techo de la infancia
y un trueno se escuchó tan fuerte
que mis tristes bichitos 
se escondieron debajo de tu lámpara
sobre mis hombros
se escuchaba llorar 
la lluvia de casi un siglo
y lentamente de la garganta
brotaron lágrimas de moras y pellizcos
se angostó el camino de los versos
abriéndose las grietas de mi más reseca tierra
me quedé 
muda
desnuda
desolada
inundada de mieles y limones
aún sigo buscando llegar a alguna orilla
para poder desprenderme  de estas algas 
de esta piel de musgo que no es mía

no llovió afuera
como lo esperábamos
y el cielo pesa otra vez
como si fuera un muerto.

©Germana Martin

esa canción


Inquieta, 
inundada de peces, 
me subo a tus mareas 
de luna sedienta.
Mi mano atraviesa 
el aterciopelado muro: 
la piel del sueño 
ese abismo de palabras, 
este todo-todo
que te separa de aquí.

Mi aliento te roza
desnuda tus silencios, 
y como una estrella vagabunda
mi fragilidad se acuesta a tu lado. 

Vuelvo a escuchar una vez más,
la música que sueñas:
esa canción desierta, 
sin náufragos ni pétalos.
Esa canción.

©Germana Martin



La imagen es la obra "Sirena" de Beatriz Blanca, diseñadora gráfica e ilustradora argentina.
Ha sido tomada de su blog Bett ilustraciones ¡Muchas gracias!
http://ilustracionesbeatrizt.blogspot.com

La fotografía ha sido tomada por Omar Daniel Pereira.

bollito de papel


¿qué harás 
con las mañanas
de los miércoles?
tal vez
un poema de sol 
arrojado en el cesto

©Germana Martin

mariposas



hay mariposas dentro de mí
puedo sentirlas
viajan por la sangre
se acomodan en mis hormonas
desbaratan el latido
cuando me escribes
hay mariposas
anunciando abrazos de colores
migas dulces roces mieles
y se dejan llevar por mis pasos
hacia atrás hacia fuera cielo adentro
su aleteo hace cosquillas en mis dedos
y me obligan a escribirte
para contarte que son ellas
y sólo ellas
las pequeñas mensajeras del secreto
las que me empujan
a instalarme dentro tuyo
en el cáliz verde ámbar de tu corazón
en el cuenco silencioso de tu calma
 



© Germana Martin

el jardín de mis delicias



Soy la marea de tu jardín
el rocío de tu savia
la boca de tus almendras.
Soy la luna embriagada
que duerme entre tus sueños
y sigue tus pasos
por la ruta de pétalos
que llevan a tu faro.
Vestida de polen,
desnuda de hierbas,
me despierto perfumada,
y cubierta de jazmines,
con una estela dorada
entre las piernas.
Porque empecinados de amor
fecundamos estrellas
cada noche
y por arte de magia
nos parimos poemas

© Germana Martin

mi Venusafrodea



El río del deseo fluye por las venas 
como un incendio dorado, 
como una supernova que estalla hacia dentro, 
caracola, vulva, perla, fuego.
Hay relámpagos en la sangre cuando se ama,
hay aludes, crepúsculos, cometas que se estrellan.
Late tu mirada en el cuerpo de mi Venus, 
que se mece, se aletarga, 
se deja beber, se vuelve roja de mieles 
y se entrega.
Mi loba huele tu silencio
lo tiene en la boca
en su lengua de rosa o de sirena.
Y juntos comulgamos
este vino pagano de rocío y estrellas,
cuando mi verano se queda adormecido
acurrucado y tibio entre tus piernas.

© Germana Martin

dis-tintas


y las rosas
y los cielos
siempre inevitables
provocando la dicha
el insolente deshielo 
de los corazones 
y las primaveras
pero vos y yo
descendiendo contracorriente
a ras del aire
a tientas
sin velos ni ademanes
deslizando el roce del abismo
mariposas atrapadas
hasta el fondo del ser
donde te leo y me miro
y aún así no despierto
sólo este equinoccio a contramano
que no desamordaza el grito
ni siquiera un húmedo bostezo
este vuelo solitario y desmedido
ombligo de mi misma
a contra vida
perseguida  de soles
y de fuegos

                                                    a Ivana Alvarez,
                                                   por su poema  21 de septiembre
©Germana Martin

cantata

nunca dije 
que alguien me pegara,
balbuceaste, 

entonces 
bajé del auto 
y compré a ese niño 
herido

aquel ramo de fresias
como una bofetada  


© Germana Martin


útero


Me nazco en amapolas y caricias
me nombro mujer para quererme

me abro un sendero desafiante y atrevido
me permito mirar desde mi misma
me invito a estar erguida
me deshago de miedos
escucho mis latidos
sigo mi estela de intuiciones
me busco y me pierdo en las mareas
me atrevo a mis pasos
sólo míos
me pierdo
me nublo y amanezco nueva
me gusto y me empecino
me caigo y me destrozo en partículas de amores
me enraízo
me despeño
me alboroto
me remonto
me huelo
me desdigo

Vuelvo a llamarme a mí misma
desde el útero,
para gestarme mujer en el silencio,
para decirme entera en la poesía.


© Germana Martin

pájaros ausentes


qué raro esto de sentirte lejos
extrañando esa  noche compartida
que nos unió tal vez en otros cuerpos

adivino rumores y palabras
abrazos con oleadas y tormentas
pero no hay un solo gesto
de tu piel en la mía
ni besos
ni sonrisas
ni manos
ni jadeos

sólo esta larga tarde
con  pájaros ausentes
que salieron a buscarte sin saberlo

©Germana Martin

mi


adentro
nido corazón océano
esta infinita oportunidad
de entibiar mi afelpada cadencia
                                                   de misteriosas voces
oportunísimo tiempo de poemas,
inoportuna prisa,
in-solente primavera,
que me arrastra a renaceres profundos,
allí donde crece el ocioso retoño:
la maravilla.

©Germana Martin
en agradecimiento a Ivana Gisela Álvarez Ricardo por su poema In-productiva.

boca a boca



Tu Varón Sagrado es mi Varón Sagrado.
Compartimos su elixir misterioso,
hecho piel y semilla en hombres infinitos y mortales.
Tu Varón Sagrado arropa estrellas que son únicas,
las mece en el regazo de la tierra
y las fecunda en cada caricia
que llega a la orilla de los sexos.
Varón Sagrado... Mujer Sagrada...
Se beben boca a boca la copa del Misterio.

©Germana Martin

La imagen es la obra "Pareja" de Cristina López Casas
de su blog "Lo pintado, pintado está"
http://loquepintacris.blogspot.com

tu ojo



Para que no me sueñes 
Dejo que tu ojo me atraviese… 
Entonces tu mirada 
Deshace cortezas 
Desenreda hiedras 
Descubre laberintos 
Y me dejo recorrer… 
Te permito el desembarco 
En mis orillas… 
Esta soy yo 
Con duende 
Con palabras 
Con mirada 
Esta soy yo 
Con tanto por sanar como por vivir 
Con tanta vulnerable manía de seguir creciendo 
Con tanto para mostrarte 
Con tanto miedo 
Con tanto fuego 
Con tanta risa 
Con tanto por decirte 
Esta soy yo 
Con vulva dorada y ojos de sirena 
Con uñas y lengua 
Con dulces placeres aprendidos 
Con ganas y desganos 
Con suspiros jadeos y llantos 
Con tanto por sanar… una y otra vez 
Con tanto por soltar 
Con tanto para dar 
Con tanto por pedir 
Esta soy yo 
Contradictoria vulnerable empecinada 
Tentada por la lejanía a cada paso 
Crisálida de mieles 
Niña en cuerpo de mujer 
Alma en cuerpo de niña 
Solitaria niña que no quiere buscarte 
Esta soy yo 
Sin máscara sin filtros sin radares 
Huelo a un lejano momento 
Huelo a una playa que nunca fue nuestra 
Huelo a un adiós, a un buen día 
Huelo a las flores y los dedos mojados por la lluvia 
Huelo a vos y a tu perfume adivinado 
Huelo a lo que es nuestro 
Huelo a jazmines y luciérnagas 
Huelo a polvo viento ruinas 
Huelo a mí… 
Esta que soy 
Esta que seré sin vos hasta el encuentro 
Y como no sé de ocultamientos ni de huidas 
Se me escapa mostrarte hasta lo que no quiero 
Lo que aborrezco lo que ignoro lo que se fue… 
Se me escapan estas palabras una vez más 
Para que me veas así 
Esta que soy 
Sin vueltas ni ademanes 
Con voz y caricia 
Rubia revolucionaria de tus primaveras 
Huracán deseado y presentido 
Mujer que va 
Para naufragar una vez más 
en la tormenta de tu ojo,
en el mar con estrellas de tu mirada.

©Germana Martin

mujer flecha


De mi vientre tibio 
se dispara 
una flecha de fuego... 
Y me vuelvo esta mujer lanzada al firmamento, 
una diosa o luciérnaga 
que arroja su deseo al infinito, 
que arremete con él, lo empuja, lo deshiela, 
lo atraviesa con relámpagos y cielos, 
le da vida y sustento, 
lo lleva con sus alas y volcanes, 
lo mece, lo pierde, lo despierta... 
Disparada como una flecha 
mi voz de crisálida 
trae risa de estrellas a mi boca 
y el deseo salvaje de regresar a mí misma 
veloz, liviana y libre, 
para parirme mujer 
alumbrada de faros, 
escondida de nubes, 
perfumada de bosques y de fiestas. 



©Germana Martin