lluvia


no llovió afuera
como lo esperábamos

la tormenta fue dentro
se volaron los geranios del jardín
junto con los retratos de papá y mamá
un tornado arrancó el techo de la infancia
y un trueno se escuchó tan fuerte
que mis tristes bichitos 
se escondieron debajo de tu lámpara
sobre mis hombros
se escuchaba llorar 
la lluvia de casi un siglo
y lentamente de la garganta
brotaron lágrimas de moras y pellizcos
se angostó el camino de los versos
abriéndose las grietas de mi más reseca tierra
me quedé 
muda
desnuda
desolada
inundada de mieles y limones
aún sigo buscando llegar a alguna orilla
para poder desprenderme  de estas algas 
de esta piel de musgo que no es mía

no llovió afuera
como lo esperábamos
y el cielo pesa otra vez
como si fuera un muerto.

©Germana Martin

esa canción


Inquieta, 
inundada de peces, 
me subo a tus mareas 
de luna sedienta.
Mi mano atraviesa 
el aterciopelado muro: 
la piel del sueño 
ese abismo de palabras, 
este todo-todo
que te separa de aquí.

Mi aliento te roza
desnuda tus silencios, 
y como una estrella vagabunda
mi fragilidad se acuesta a tu lado. 

Vuelvo a escuchar una vez más,
la música que sueñas:
esa canción desierta, 
sin náufragos ni pétalos.
Esa canción.

©Germana Martin



La imagen es la obra "Sirena" de Beatriz Blanca, diseñadora gráfica e ilustradora argentina.
Ha sido tomada de su blog Bett ilustraciones ¡Muchas gracias!
http://ilustracionesbeatrizt.blogspot.com

La fotografía ha sido tomada por Omar Daniel Pereira.